El bicampeón se sacó un peso de encima, más que un peso, digamos que una tonelada. Desde el 9 de septiembre de 2007 que Fernando no conocía el sabor de la victoria. Fue con un McLaren, en Monza. Y hacerlo después de un año y en la primera carrera que se corre de noche tiene doble sabor. Hace dos semanas perdió dos récords a manos de Vettel, ya no es el piloto más joven que obtuvo una pole y una victoria. Pero de ahora en más, hasta que llegue el fin del mundo, cada vez que se pregunte quien obtuvo la primera victoria en una carrera nocturna de F1, se acordarán de Alonso.
Por esto y muchas cosas más, el asturiano ahora está más distendido. Eso no quita que modifique decisiones ya tomadas pero el ánimo de cara al futuro es diferente.
¿A qué te sabe esta victoria? Sabe bien porque es inesperada. Es como cuando el Numancia le gana al Barça o al Madrid. Es algo que no se espera, y tanto la afición como los propios jugadores lo disfrutan más que cualquier otra victoria. Y en la Fórmula Uno pasa lo mismo. Cuando más o menos es todo una monotonía, cuando siempre ganan los mismos y hay un dominio total de algunos coches, pues alguna carrera en agua, alguna por las calles, que haya incidentes o que pase algo, como ha pasado hoy en Singapur, suele haber un poco de variación en esa monotonía y hoy nos ha tocado ser a nosotros los protagonistas.
¿Cómo han sido las últimas vueltas? ¿Supongo que escuchabas ruidos de todo tipo?
Sí, más que nada tenía miedo de que le pasara algo al coche. El problema de ayer no estaba completamente resuelto, sí resuelto, pero no habíamos entendido por qué había dejado de funcionar la bomba de gasolina, seguimos sin saberlo, y al haber pasado ya un problema tan extraño como ése, siempre piensas que puede repetirse, entonces vas con los dedos cruzados, intentando no pisar un bordillo más de la cuenta y esquivando los baches para que el coche vaya lo más seguro hasta la meta.
Hoy ya podrás dormir tranquilamente
O no se duerme, da igual. Hoy vale todo, y el horario ya no importa. Hay que estar a punto para Fuji dentro de quince días, por tanto si ahora estamos dos o tres días con el horario cambiado, pues no pasa nada, si es para pasarlo bien, bienvenido sea.
¿Este resultado podría haberse dado en otro circuito, o ha ayudado el circuito?
Veremos en Fuji. Tengo una cierta curiosidad por ver cómo sale la carrera allí. El coche ha funcionado mejor de lo esperado aquí, hemos tenido un gran fin de semana, desde el viernes hasta el domingo, y no sabemos muy bien si es porque el coche está mejorando de verdad día a día, o porque este circuito nos ha beneficiado de manera especial.
¿Esta carrera puede ser un punto de inflexión?
Bueno, creo que es difícil ganar una carrera, lo sabemos, y parecía mucho más difícil este año. No sé si será un punto de inflexión, pero lo que está claro es que para la moral del equipo y la mía propia es un gran paso adelante. Siempre he tenido confianza en mi mismo, sabía que ganaría tarde o temprano, no pensaba que tan temprano, pero sabía que algún día volvería a ganar. Pero para el equipo, los mecánicos, que están hasta las tantas de la madrugada trabajando, incluso aquí, que a cuatro carreras del final pues hemos introducido un nuevo alerón delantero, que da muestras del trabajo y el esfuerzo que ha hecho todo el mundo, es un gran recompensa y esa es la alegría que te llevas.
¿Qué has sentido cuando has visto que tenías la carrera ganada?
Nada en especial. Durante toda la carrera iba pensando la suerte que había tenido, al verme primero, pensaba que suerte he tenido, estaba de los últimos y ahora estoy liderando, si no hay otro safety car y no me pasa nada en el coche, seguramente tengo la carrera en la mano. Adelantar iba a ser difícil que me adelantaran porque es un circuito donde no hay muchos puntos de adelantamiento, errores no pienso cometer ninguno, y no voy a arrimarme a ningún guardarraíl más de la cuenta, y la carrera estaba ya en la mano. Iba pensando en que por fin estaban saliendo las cosas bien y cuando pasas por meta te diriges más a los mecánicos, todos en el muro, piensas en ellos, la vuelta que entras hablas con el equipo y lo celebras con el equipo y no en solitario.
No lo has exteriorizado mucho
En el podio estaba un poco fastidiado físicamente. No estaba para hacer muchos gestos. Estaba un poco débil. La carrera ha sido larguísima, con muchas exigencias, donde no tienes tiempo para descansar, hacemos 260km, se reduce el nº de kilómetros de la carrera. Aquí hemos hecho los 300 enteros, dos horas de carrera con esta humedad, no me ha funcionado el agua como suele pasar en las carreras estas de máxima exigencia, y en el podio veía manchas de colores, pero no reconocía a las personas. Veía donde estaba Renault, y donde estaba Williams, pero no sabía quien era cada uno.
¿Estabas totalmente mareado?
Sí, aparte estás con la concentración del coche, y en el podio había unos focos directos a ti, y te entraba por los ojos, y no estaba para muchos movimientos en el podio y disfrutabas lo justo.
¿No te has enterado de lo que te ha dicho Hamilton en el podio?
Sí, eso sí. Me ha dicho justo eso. Que la carrera había sido más física que ninguna otra y que incluso más dura que Sepang. He respondido que sí, y poco más. ¿Y los golpes en el pecho al bajarte del coche? Nada. Igual que ayer, cuando me vi en la tele el gesto de desesperación no recordaba haber hecho nada. Me baje del coche y no recordaba haber hecho ningún gesto y sí lo hice. Te salen de dentro. En los momentos extremos, o de tristeza o de alegría, haces cosas y gestos que luego no puedes explicarlos. No sabes por qué lo has hecho.
¿Este triunfo puede influir en tu futuro?
No, nada. Igual que la avería de ayer. Siempre he dicho que la prioridad va a ser estar en Renault porque cuando vine aquí el año pasado es porque pensaba que ellos pueden hacerlo bien. Este año ha salido regular, y ni va a afectar que el coche se haya roto ayer y puedes pensar que te ha decepcionado el equipo, ni hoy porque has ganado y vas a renovar con ellos de por vida. No cambia de un día para otro. Es una decisión más meditada que la sensación que tengas cada día.
¿Vamos a tener que esperar a final de temporada para conocer tu futuro?
Igual hay que esperar a final de temporada, pero no lo sé, igual antes de Fuji se sabe algo. Si os digo que antes de Fuji o de China se sabe algo, igual os miento porque no lo sé tampoco. Lo más seguro es que valdrá más esperar a final de temporada y así estamos todos más tranquilos.
¿Con esta victoria te quitas la espina de Hungría 2006?
No, yo creo que ninguna del pasado. Es más el resumen de este año, la impotencia de este año en algunas carreras. En Canadá, donde pude subir al podio no salió bien. En Mónaco, donde podía subir al podio y cometí demasiados errores yo. En Barcelona, el coche iba muy bien y rotura de motor. Valencia la decepción de correr en casa y no acabar. Todas estas cosas se iban amontonando una encima de otra y decías que pase este año, que ya vendrán luego las victorias y los momentos buenos. Y esta victoria supera todo lo malo que me ha pasado.
¿Qué valor le das a ganar la primera carrera nocturna de la historia?
Es bonito ganar por primera vez en un circuito nuevo porque formas parte de la historia y seguramente habrá más carreras nocturnas en el futuro, pero la primera la has ganado tú y eso es emocionante. Pero más que eso le doy importancia a ganar en otro circuito nuevo, igual que el año pasado cuando ganaba en Monza, eran circuitos donde no había ganado y te da especial ilusión para ver si puedes completar los 20 que hay en el calendario y poder decir que los has ganado todos, aunque sea en diferentes años, pero en todos has subido al cajón más alto. Por ejemplo aquí en Singapur podemos poner la X, haga lo que haga en los próximos años.
¿Esta victoria tiene más valor que otras muchas que has conseguido?
Sí, tiene más valor seguramente que otras. He ganado 20, algunas recuerdo a principios de temporada 2005 y 2006, que ganamos el Campeonato del Mundo al final, que las carreras las ganábamos en las tres o cuatro primeras vueltas, tirábamos fuerte, y luego era mantener la ventaja. Eran carreras muy defensivas. Cuando tienes un coche que no está para optar a la victoria, tienes que tirar todas las vueltas, hacer todo lo que puedas y arriesgar al máximo, y luego si sacas el resultado adelante tiene más valor y te deja mejor sabor de boca que otras victorias.