Lewis Hamilton, piloto de McLaren entrenará más que nunca en los próximos meses para asegurarse de que no tendrá que pasar por otra temporada tan dura como la que acaba de terminar.
El campeón del mundo de 2008 comenzó la temporada 2009 de la Fórmula 1 con una descalificación, después de mentir a los delegados de Australia y luchando con un coche que no estaba a la altura de sus rivales.
Terminó en Abu Dhabi, el pasado domingo, con una retirada, a pesar de que partía desde la pole, seguro que no era lo que él mismo esperaba para despedir el año.
A sus 24 años de edad, el británico consiguió acabar quinto en la clasificación general, con dos victorias y cinco podios.
En la adversidad, el campeón más joven de este deporte se hizo más fuerte y más sabio, y ahora quiere arrebatar el título a su compatriota Jenson Button.
"Esta ha sido una temporada muy complicada para el equipo, desde que formo parte de él", dijo Hamilton, sentado con un pequeño grupo de periodistas en Abu Dhabi la semana pasada.
"Todos estamos trabajando codo con codo, tratando de asegurarnos de no dejar piedra sobre piedra, porque queremos llegar a la temporada 2010cuando de comienzo en Bahréin el marzo próximo, con las mejores posibilidad de ganar la carrera y poder luchar por el título desde la primera prueba”.
"Obviamente hemos aprendido mucho de esta experiencia, y espero que no vuelva a suceder".
UN AÑO DURO
Respecto a la primera prueba de pretemporada, que será en febrero, Hamilton dijo que estaría en el coche "todo el tiempo que pueda", y además, mantendrá una estrecha vigilancia sobre la evolución del mismo.
"Siempre estoy en contacto con mis ingenieros, preguntando qué partes han sido desarrolladas, si han probado esto o aquello, ¿por qué?. Quiero saber como evolucionará el coche, y ahora puedo decirles mucho acerca del nuevo coche ¿por qué vamos de esta manera y no de esta otra?. Yo siempre hago un montón de preguntas".
A pesar de la conmoción de perder el título de campeón del mundo sin opciones para defender su título, Hamilton dijo que la temporada había sido fantástica.
Embarcarse en su tercer año en la Fórmula 1, defendiendo el título por primera vez y verse obligado a reducir sus expectativas, mientras que los recién llegados Brawn y Red Bull modificaban el orden jerárquico en la cabeza.
"Ha sido un buen año. Largo y duro, lleno de un montón de grandes lecciones, no sólo para mí, sino también para el equipo", dijo.
"Hemos salido fortalecidos, mentalmente, y como persona creo que he aprendido mucho sobre mí mismo. Creo que he crecido, soy mucho más maduro y más sabio en las decisiones que tomo”.
"Como piloto, la lucha en media pista, me ha permitido aprender cómo trabajar con el equipo y tirar hacia adelante de una manera productiva, buscando la forma de levantar el equipo y se mantenerse funcionando”.
"Es fácil hacerlo cuando estás delante todo el tiempo, pero hacerlo cuando estás en la parte de atrás, es otra experiencia", añadió el inglés, que perdió el título en su primera temporada en la Fórmula 1 por un punto.
"Cada experiencia es única, y son sobre todo las malas experiencias, son las que te ayudan a construir tu carácter. Oponerse a ellas, y recuperarse, son la muestra de que han sido superadas”.
"No se puede cambiar el pasado. De hecho, somos lo que hacemos. Y si aprendes de ello, te haces más fuerte", dijo Hamilton. "Pero la vida sigue”.
ANÁLISIS DE LOS RESULTADOS
Hamilton hizo una disculpa pública en Malasia, el pasado mes de abril sobre la controversia de la mentira, explicando que era la mayor vergüenza que había pasado y explicando que había cometido un error”.
"Echando la vista atrás, seguro, que todos encontramos cosas que podríamos haber hecho de un modo diferente, pero ya es agua pasada", dice ahora. "Fue una gran lección aprendida".
A finales de julio, McLaren fue más competitivo y Hamilton ganó en Hungría, una carrera eclipsada por el traumatismo craneal que sufrió el piloto de Ferrari, Felipe Massa.
Logró una segunda victoria, bajo los focos de Singapur, y habría podido celebrar una tercera victoria en Abu Dhabi, si el problema de los frenos no lo hubiese obligado a detenerse.
"Ha sido una montaña rusa de temporada y he disfrutado, a pesar de que en la primera mitad de temporada no tuvimos muchas oportunidades como equipo", dijo.
"Siento que mi relación con todas las personas en mi equipo creció y se ha hecho más fuerte, y como piloto siento que he crecido”.
"Así que no creo que todo nos haya salido mal. Hemos vuelto a las primeras posiciones y logramos un par de victorias, que no esperábamos. Además, nadie ama este deporte tanto como yo", añadió.
Hamilton tiene además un incentivo adicional para estimular su carrera. Pues el ex jefe Ron Dennis le prometió que si ganaba tres títulos, le regalaría un deportivo McLaren F1, serie limitada.
[Traducción literal]"Cada vez que paso por delante de él, ni siquiera creo que mi novia tiene la misma apariencia, Dios la bendiga", sonrió. "Ella definitivamente tiene un rival allí. Me encanta ese coche, siempre me encantó”.[/Traducción literal]