
Cuentan por ahí que fue Ken Anderson. Otros dicen que el que puso llave y bajo las persianas fue Peter Windsor. Lo cierto es que el equipo norteamericano USF1 (bueno… en realidad nunca llegó a ser un equipo), ha cerrado sus puertas definitivamente. Lo que significa que ni siquiera se presentarán al concurso que reabrió la FIA, para retener la butaca el año que viene. Por lo pronto, según informa The Charlotte Business Journal, Ken Anderson...