Ahora que su hijo se ha quedado sin butaca, la intención del tricampeón mundial es asegurarle una para la temporada 2010. Y considerando que la salida de Renault ha sido conflictiva y que seguramente le costará a Nelsinho que lo contraten de otra escudería, entonces que mejor que poner un equipo a su disposición. Lo cierto es que el también conflictivo padre, recordado más por sus continuas críticas a Senna que por sus títulos, se ha convertido en uno de los candidatos que se barajan para tomar el mando de la estructura suizo alemana.
En declaraciones al diario brasileño O Globo, Nelson se puso sólito el cartel de candidato al asegurar que existe la intención de quedarse con Sauber, en asociación con el director del equipo Super Nova de GP2, David Sear. "Todo lo que puedo decir es que me gusta el nombre 'Piquet F1', ¿qué opináis?", contaba el brasileño.
Pero al carioca no le será fácil, del otro lado del océano lo espera Joan Villaldelprat, el otro nombre que ronda en el ambiente, y con un proyecto serio, solidarizado golpeando las puertas del cielo.
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