F1 - El mundo de la fórmula uno

La FIA ha instado también a Renault, Mercedes y Force India a hacerlo

Difusor de McLaren

McLaren ha confirmado que ha modificado sus difusores para el Gran Premio de Australia, que se disputara este fin de semana en Melbourne. Las dudas sobre la legalidad de sus elementos aerodinámico se confirman, pues la FIA les ha instado a realizar las modificaciones tras aclarar ciertos aspectos del reglamento.

Lewis Hamilton comenta que, a pesar de todo, no será inconveniente para la escudería: “Los ingenieros han dicho que no causa ninguna diferencia”.

Pero de alguna manera influirá cuando la FIA les ha obligado a agrandar el agujero situado en el difusor trasero del MP4-25, que se usa para introducir la varilla de arrancada del motor en caso de calado. Los expertos de la FIA creen que eso producía un canal de aire que aumentaba el agarre aerodinámico de forma irregular según el reglamento. Y no sólo McLaren lo usó: también Mercedes, Force India y Renault tendrán que cambiar este elemento.

Pero tampoco se muestra preocupado el campeón del mundo Jenson Button, pues calcula la pérdida de tiempo tras la modificación en “una o dos centésimas”. Button confía en su equipo y en que serán capaces de seguir adelante sin quebraderos de cabeza: “Realmente no sé cómo nos afectará, pero es algo que no debe causarnos preocupación”.

Durante la presentación del McLaren, en la pretemporada, las fotografías de la parte posterior del monoplaza eran prácticamente imposibles de realizar. Y las pocas que se filtraron dejaron ver un cartón tapando la zona del difusor con la inscripción: “Por favor, no hacer fotografías”. Algo tenían que ocultar. Pero poco les ha durado. Como poco les durará la exclusividad de su otro invento, el “canal” de aire, este sí, legal: Red Bull ya está probando el propio, aunque irá colocado en el pontón lateral izquierdo. Sebastian Vettel confirma que su RB6 no contará aún con este sistema en Australia: “No es fácil de copiar; es bastante ingenioso”, aseguró este jueves confirmando que todos los equipos punteros preparan su versión propia.