F1 - El mundo de la fórmula uno

En el esperado retorno de Michael Schumacher a la Fórmula 1, el heptacampeón no logró un espectacular resultado tal y como nos tenía acostumbrados en el pasado. Se dice que Michael no estaba especialmente contento en Bahrein porque no se siente muy cómodo pilotando el Mercedes, y es que hay que tener en cuenta que los neumáticos con los que se compite en el 2010 son muy diferentes a los que el alemán utilizó en sus últimas temporadas en F1, por lo que necesita adaptarse, al igual que a los monoplazas actuales.

Su compañero y también nuevo piloto del equipo, Nico Rosberg, fue más rápido que Michael todo el fin de semana. Rosberg estaba acostumbrado a ser más rápido que su compañero Kazuki Nakajima cuando pilotaba para Williams, pero este año su compañero y rival es “algo” más competitivo que el japonés…

Aunque los Mercedes estuvieron más lejos de la cabeza de lo esperado, el jefe ejecutivo de Mercedes, Nick Fry, se muestra confiado en reducir esa diferencia puesto que sus dos pilotos tienen muy claro lo que quieren cambiar para mejorar el coche.

Nico Rosberg ha impresionado al equipo por su actitud cuando supo que Schumacher sería su compañero de equipo:

“Me ha impresionado el enfoque de Nico desde el momento en el que le comunicamos que Michael se uniría al equipo. No ha parecido desconcertarle en ningún momento. Se lo ha tomado con calma, y aunque a veces ha centrado su atención en Michael, no parece perturbarle lo más mínimo. Ha hecho su trabajo y ha demostrado lo rápido que es, y creo que seguirá mejorando“.

Con esta pareja de pilotos y Ross Brawn al mando del equipo, saben que tienen mucho potencial de mejora, y lejos de estar abatidos por el resultado de Bahrein, volverán en Australia a trabajar intensamente para recuperar el terreno perdido.

Schumacher llegará con la telemetría de Bahrein bien estudiada para ver dónde perdía tiempo respecto a Rosberg y no descansará hasta ser más rápido que él, para convertirse en el líder indiscutible del equipo, como siempre ha hecho. Hasta entonces, no sonreirá plenamente.