F1 - El mundo de la fórmula uno

Aún no. Pero es lo que prometieron los muchachos de la GPDA (la asociación de pilotos de Grandes Premios, que esta presidida por Pedro de la Rosa) si la FIA no rectifica el aumento de la superlicencia para poder correr en la F1.
Los pilotos de la máxima categoría, Lewis Hamilton, Kimi Raikkonen y Adrian Sutil aún no forman parte de la GPDA, se encuentran molestos por las altas tasas que deben pagar para adquirir las licencias año tras año. Y por ello el sindicato ha decidido reunirse con Max Mosley, presidente de la FIA, para mostrarle su rechazo por el encarecimiento de permisos.

Al menos así adelantó el sitio de Auto Motor und Sport, quien además asegura que si la FIA no escucha el llamado de los pilotos, el sindicato iniciará una huelga en una de las próximas carreras.

Desde esta temporada, cada piloto debe pagar una especie de inscripción de 10 mil euros, más otros 2.000 por cada punto que haya logrado en el campeonato de la temporada anterior. Cuando antes se pagaba sólo 1.500 euros por año, más 250 euros por cada punto que se había sumado. Esto significa que, a ciencia cierta, las tasas de la FIA se multiplicaron por ocho en comparación con el último año. Sin dudas algo que no le cae para nada bien a los pilotos.
Para tener una idea aproximada del aumento, el actual campeón mundial Kimi Räikkönen, el subcampeón, el británico Lewis Hamilton, y el español Fernando Alonso, han tenido que pagar más de 200.000 euros para renovar este año su licencia. Número al que se aproximará el polaco Robert Kubica si deja muy atrás los 42 puntos que por el momento lo hacen liderar el campeonato.

Mientras tanto la FIA asegura que el encarecimiento de la superlicencia ha sido necesario y motivado para invertir más dinero en medidas para aumentar aún más, la seguridad de los pilotos en la Fórmula 1.