F1 - El mundo de la fórmula uno

El rendimiento del F1.08 en el GP de Hungría ha dejado sin palabras a Mario Theissen, director del equipo alemán. Apartando a Heidfeld, de quien se esperaba una carrera complicada dado su lugar de largada, el monoplaza de Kubica no rindió tal cual lo esperado y estuvieron a punto de irse a casa sin ningún punto.
Kubica, que había clasificado cuarto y parecía mostrar algo de recuperación en el BMW, tuvo un pimer stint competitivo pero luego se esfumo de la carrera, perdiendo ritmo no sólo con Ferrari y McLaren, sino también con Toyota y Renault.
"Nuestro rendimiento en los entrenamientos libres del viernes fue razonable, en la clasificatoria del sábado fue de buena a muy buena, pero en la carrera fue completamente diferente", admitía Theissen.

"El domingo parecía que no estábamos ahí, que la carrera estaba disputándose sin nosotros. En ningún momento Robert o Nick pudieron igualar los tiempos que marcaron en la clasificación. He de admitir que no sé la razón", indicó el germano.

"Analizaremos la ecuación de coche, reglajes, neumáticos y condiciones de la pista. Observando los tiempos de Robert en la clasificatoria, debería haber estado luchando entre los primeros, pero en realidad, en algunas fases de la carrera, fue el más lento de la pista. Lo que sucedió fue completamente inesperado", concluyó.