Ni bien se bajo del auto se señaló el casco y nos emocionó a todos. Ya nos anticipaba unas lágrimas cuando al cruzar la meta, desde boxes mediante la radio lo felicitaban y del cockpit no se entendía una palabra... Y al llegar al pitlane con el color verde fluorescente en la parte superior de su cobertor, la sensación de alegría, de justicia, invadió a todos.
Después de tanta suerte en contra a lo largo del año, a lo largo de su trayectoria, le salió una. Rubens Barrichello se encontró con un error logístico de McLaren, voló como nunca y volvió a la victoria. Victoria que estaba servida en bandeja para Hamilton luego de un aplacante primer stint, pero que la escudería Woking terminó donando a los de Brackley en los boxes con unos segundos de más.
Justamente en la primera carrera en la que no se encuentra Felipe Massa, recuperándose de la desgracia en la que Rubinho se siente parte por haberse desprendido de su auto el muelle. Justamente en el circuito donde su mejor amigo dentro del paddock se quedó con la primera edición de esta carrera el año pasado, Barrichello se aseguro que la bandera brasileña permaneciera un año más en lo más alto del podio.
En presencias de Michael Schumacher, Rubens consiguió su décima victoria en la Fórmula 1, la primera con un coche que no es la Ferrari y para completar la tarde simbólica, rodeado de los últimos dos campeones que tiene la máxima categoría.
La carrera estaba a pedir de Hamilton, quien se había asegurado una diferencia de ocho segundos en el primer stint, y lo controlaba con solvencia en el segundo, pero llegó el último repostaje y en boxes no tenían los neumáticos preparados, lo que provocó que la parada se demorara cinco segundos más de lo normal y favoreciera al experimentado brasileño.
Por suerte para el británico, Kimi estaba bajo control, pero Rubens aprovechó el descuido, sacó dotes de velocista, al mejor estilo que su antiguo, histórico y verdugo compañero, y le arrebató lo que hubiera sido su segunda victoria consecutiva.
Para Ferrari el tercer puesto no podía ser más. El KERS dio resultado en la largada y el finlandés del sexto paso al cuarto lugar, pero delante estaba Barrichello y ya conocemos como responde Kimi a la monotonía sin sobrepasos. Su ritmo pasó a ser de velocidad crucero y se terminó conformando con el tercer puesto. No obstante para el equipo italiano es una recompensa.
A las puertas del podio terminó pasando apuros Heikki Kovalainen. El otro nórdico que tiene la categoría sigue sin mostrar consistencia en carrera desinflándose de comienzo al final. Largó segundo a espaldas de su compañero y llegó cuarto apurado por Nico Rosberg quien no pudo mantener la racha de los cinco puntos por carrera y se tuvo que conformar con cuatro.
Tras ellos, sin poder hacer más se conformó con el sexto lugar Fernando Alonso. El asturiano sólo quería llegar y ver la bandera a cuadros junto a su gente, espina que se sacó de la edición anterior.
Completaron los puestos puntuables Jenson Button y Mark Webber. El inglés acercándose cada vez más a su primer campeonato a pesar de que en las últimas carreras se esté llevando poco puntos. Porque Red Bull nuevamente no supo aprovechar la oportunidad.
Después de tanta suerte en contra a lo largo del año, a lo largo de su trayectoria, le salió una. Rubens Barrichello se encontró con un error logístico de McLaren, voló como nunca y volvió a la victoria. Victoria que estaba servida en bandeja para Hamilton luego de un aplacante primer stint, pero que la escudería Woking terminó donando a los de Brackley en los boxes con unos segundos de más.
Justamente en la primera carrera en la que no se encuentra Felipe Massa, recuperándose de la desgracia en la que Rubinho se siente parte por haberse desprendido de su auto el muelle. Justamente en el circuito donde su mejor amigo dentro del paddock se quedó con la primera edición de esta carrera el año pasado, Barrichello se aseguro que la bandera brasileña permaneciera un año más en lo más alto del podio.
En presencias de Michael Schumacher, Rubens consiguió su décima victoria en la Fórmula 1, la primera con un coche que no es la Ferrari y para completar la tarde simbólica, rodeado de los últimos dos campeones que tiene la máxima categoría.
La carrera estaba a pedir de Hamilton, quien se había asegurado una diferencia de ocho segundos en el primer stint, y lo controlaba con solvencia en el segundo, pero llegó el último repostaje y en boxes no tenían los neumáticos preparados, lo que provocó que la parada se demorara cinco segundos más de lo normal y favoreciera al experimentado brasileño.
Por suerte para el británico, Kimi estaba bajo control, pero Rubens aprovechó el descuido, sacó dotes de velocista, al mejor estilo que su antiguo, histórico y verdugo compañero, y le arrebató lo que hubiera sido su segunda victoria consecutiva.
Para Ferrari el tercer puesto no podía ser más. El KERS dio resultado en la largada y el finlandés del sexto paso al cuarto lugar, pero delante estaba Barrichello y ya conocemos como responde Kimi a la monotonía sin sobrepasos. Su ritmo pasó a ser de velocidad crucero y se terminó conformando con el tercer puesto. No obstante para el equipo italiano es una recompensa.
A las puertas del podio terminó pasando apuros Heikki Kovalainen. El otro nórdico que tiene la categoría sigue sin mostrar consistencia en carrera desinflándose de comienzo al final. Largó segundo a espaldas de su compañero y llegó cuarto apurado por Nico Rosberg quien no pudo mantener la racha de los cinco puntos por carrera y se tuvo que conformar con cuatro.
Tras ellos, sin poder hacer más se conformó con el sexto lugar Fernando Alonso. El asturiano sólo quería llegar y ver la bandera a cuadros junto a su gente, espina que se sacó de la edición anterior.
Completaron los puestos puntuables Jenson Button y Mark Webber. El inglés acercándose cada vez más a su primer campeonato a pesar de que en las últimas carreras se esté llevando poco puntos. Porque Red Bull nuevamente no supo aprovechar la oportunidad.
Ya que Sebastian Vettel rompió motor en carrera, el segundo este fin de semana. Y Mark Webber tuvo acaso su peor carrera del año arribando noveno, fuera de los puntos, superado hasta por Robert Kubica, el polaco que se quedó con la última unidad con un equipo que ya se dio por perdido.
Tan perdido como en Milton Keynes se puede comenzar a dar el campeonato. Porque el nuevo escolta es Rubens Barrichello y Button apenas perdió medio punto más respecto a quien lo secunda de turno. Quedan sesenta puntos en juego y el británico ya tiene casi la tercera parte en el bolsillo. ¿Usted como lo ve?
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