El Gran Premio de Malasia volvió a ser un espejo de lo que fue la pasada temporada mundial 2009, con muchos errores desde el pitwall que perjudicaron a sus pilotos, Felipe Massa y en ese entonces a Kimi Raikkonen. El primer gran error del 2009 fue en Malasia, donde en carrera, llamaron a Kimi Raikkonen a boxes por neumáticos de lluvia extrema cuando la pista estaba totalmente seca, y es que la predicción meteorológica decía que la lluvia llegaría cuando el finlandés saliera de boxes. Mala elección, Kimi arruinó sus neumáticos y cuando llegó la lluvia, 5 vueltas después, la carrera estaba terminada para el piloto de Ferrari. Parece que los fantasmas volvieron a aparecer en Malasia el pasado fin de semana. Los errores del equipo italiano fueron increíbles, como así tiempo no se veía en un equipo de punta como son los de Maranello. Durante el Sábado, cuando se disputaba la sesión de clasificación, tanto Felipe Massa como Fernando Alonso decidieron, por orden del equipo, aguantar unos minutos en boxes esperando a que la lluvia se detenga, ya que recordemos las complicadas condiciones climatológicas que acecharon a los equipos durante todo el fin de semana, sobre todo el día Sábado. La decisión fue errónea, ya que la misma nunca se detuvo sino que cada vez fue aumentando su potencia, lo que terminó con la elimnación de Alonso y Massa en la Q1, por no poder mejorar los tiempos marcados con una pista mucho mejor. Esos errores, son los que una escudería como Ferrari no debe cometer, y Stefano Domenicalli reconoce que la lección fue aprendida, y que para las próximas carreras sus pilotos saldrán a pista sin contemplaciones, sin depender de lo que los demás equipos hagan. Conclusión: la estrategia del equipo de Maranello fue copiar la de sus equipos rivales. Otra crítica que cayó sobre Ferrari en este gran premio, fue la fiabilidad, ya que en la tercera carrera del mundial, la escuadra sufrió problemas con un segundo motor, después de los inconvenientes en Bahrein con los problemas de sobre calentamiento. Esta vez no fue el de Massa quien falló, sino el del español, quien a 2 vueltas del final, y en franco duelo con Jenson Button, piloto de McLaren y último campeón mundial, rompió la unidad montada en el F10. Probablemente la causa del problema fue la rotura del embrague del asturiano en la vuelta previa del GP de Malasia, por lo que Alonso debió adelantar, defender, acelerar, frenar y doblar sin embrague, lo que resulta bastante complicado. Además, la rotura era más que predecible, notándose claramente como su motor bajaba bruscamente las revoluciones en las curvas de baja velocidad, a tal punto que parecía que se pararía, algo que finalmente hizo. De este modo, Stefano culminaba con su autocrítica, con una frase final alentando al equipo a entregarle mejoras a los monoplazas de sus 2 pilotos, que se encuentran liderando el campeonato mundial. Ferrari se presenta como un equipo rápido, fuerte, pero deberá trabajar un poco en el aspecto de la fiabilidad si quiere llegar a la última fecha con chances al título mundial, misma tarea que tendrá su más gran rival en estos momentos en la lucha por el título, Red Bull.
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