F1 - El mundo de la fórmula uno

Alejandro Urtubey, titular del Top Race y uno de los aportantes a la campaña de José María López acusó al ex periodista y manager Felipe McGough de haber arruinado la carrera del cordobés. Urtubey aseguró que McGough le mintio y que siguió pidiéndole dinero incluso cuando ya sabía que el equipo USF1 no estaba en condiciones de correr la temporada 2010. Los últimos tres pilotos argentinos en la F-1 también criticaron a los managers.

El viernes pasado debe haber sido el día más frustrante en la carrera de Pechito López. Fracasaron los intentos de conseguir una butaca en otro equipo de Fórmula 1 y su cancelado debut en la categoría quedó atado al contrato de un equipo como USF1, que no se sabe si alguna vez terminará de fabricar sus primeros autos.

Pechito había alquilado por 8 millones de dólares una butaca para la temporada 2010 en este equipo debutante nortemericano. Dos millones de dólares fueron aportados por el Gobierno nacional, a través de la Secretaría de Turismo, y hubo varios aportes privados más. Uno de ellos fue el de Alejandro Urtubey, hermano del gobernador de Salta, titular de los derechos del Top Race -donde Pechito salió campeón el año pasado- y dueño de la revista Corsa, que se había asegurado así todas las entrevistas exclusivas con el cordobés.

El fin de semana, durante la presentación del Top Race en Bahía Blanca, Urtubey y varios pilotos culparon a Felipe McGough, periodista y manager de Pechito, por el manejo de la situación.

"El máximo responsable de esta situación para mí es Felipe McGough. Es un mentiroso", declaró Urtubey. "Él me mintió en la cara. Resulta que de un día para el otro el equipo se cayó. Pusimos 830.000 dólares que se depositaron hasta el 8 de febrero. Nos hicieron poner plata sabiendo que el proyecto estaba caído ya que el 15 de enero el principal inversor Chad Hurley se había ido. Nos mintieron a todos. Las cosas, desde los sponsors, no se hicieron mal. Pechito llegó como Fangio y Reutemann con el apoyo del Gobierno Nacional. Pechito quedó en el camino porque el tipo que estaba al lado era un inepto que no supo darse cuenta de lo que pasaba. Nosotros creímos que este hombre había cambiado pero McGough sigue siendo un chanta”.

El piloto Marcos Di Palma también apuntó contra los managers: "Víctor Rosso y Felipe McGough son dos verseros. Ellos hablan serios, se hacen los serios y son dos mentirosos. Yo por lo menos no soy serio y me río, pero no soy un mentiroso".

Gastón Mazzacane, ex piloto de Fórmula 1 opinó: "Acá se trató anticipar algo, se dijo que a Ecclestone le interesó pero lo cierto que no fue así. Yo integré el equipo de Alain Prost en 2001 cuando él se quedó afuera de la F-1 y a Ecclestone no le importó. Si a un cuatro veces campeón del mundo se lo dejó a fuera ¿por qué iba haber interés por el USF1 o el mismo Pechito?"

Otro ex F-1, Esteban Tuero agregó: "Ni Felipe McGough ni Víctor Rosso están en condiciones de hacer de manager de Pechito. Dicen las cosas en serio, pero no son serios. López no tiene nada que ver en todo esto, él hizo las cosas bien".

Por último Norberto Fontana, quien también alguna vez acusó a Felipe McGough por el manejo de su paso por la F-1 apuntó: "Hay muchos culpables. La llegada de Pechito a la F-1 es de una manera muy extraña ya que viene de correr en autos con techo, es extraño, creo que ese no era el camino".