El Red Bull de Sebastian Vettel se quedó sin gasolina. Esa es la principal razón que hizo que el alemán ralentizara su ritmo de carrera y fuese adelantado por un total de tres pilotos en GP de Bahrein.
Red Bull tapó un fallo estratégico en la medición de gasolina con el fallo de una bujía. Según desvela Carlos Miquel para el diario AS, Sebastian Vettel exprimió al máximo su monoplaza en el inicio de carrera con el objetivo de despegarse de los Ferrari, lo que incrementó de manera considerable el consumo del vehículo.
El motor del Red Bull sufrió un problema en una bujía, que se hizo notar en el sonido del monoplaza, pero no vio mermado su rendimiento de manera importante. Como ejemplo quedan los tiempos que realizó el alemán (2:02) cuando ya cuarto intentaba evitar el adelantamiento de Nico Rosberg.
Bajó el rendimiento
A consecuencia del inicio de carrera, en el que Vettel exprimió al máximo su motor, el Red Bull se vio obligado a reducir las vueltas de motor para llegar con gasolina suficiente a la línea de meta. Esta reducción permitió el adelantamiento de los Ferrari y del McLaren de Hamilton.
Sebastian Vettel vería como su Red Bull se quedaba parado nada más cruzar la línea de meta. Sin gasolina a raíz de poner el máximo de vueltas de motor en las últimas vueltas para evitar perder la cuarta posición en carrera.
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