La escudería McLaren ha comunicado oficialmente que el fuerte despiste que provocó el abandono de Lewis Hamilton en la penúltima vuelta del GP de España se debió a un fallo en la llanta delantera izquierda.
Según ha podido determinar el equipo británico, el moreno se retiró debido a un problema casi idéntico al que sufriera su ex compañero de equipo Heikki Kovalainen en la misma carrera hace dos años. Con la diferencia que el fallo en el accidente de Kovalainen se produjo en el peor lugar de Montmeló: la curva Campsa. Mientras que Hamilton tuvo mejor suerte y perdió velocidad en la escapatoria de la curva 3 antes de impactar contra las barreras del circuito.
"Ayer finalizamos el análisis. Como dije en ese momento, no creíamos que fuera causado por una perforación o un pinchazo, todas las pruebas nos dijeron que la llanta se había roto, lo que provocó la explosión, y ahora estamos investigando el por qué del fallo de la llanta," explicó el director del equipo McLaren, Martin Whitmarsh, en una conferencia de Vodafone el martes pasado, confirmando que el proveedor de neumáticos Bridgestone ha llevado a cabo un análisis detallado para verificar que un pinchazo no fue la causa de su accidente.
Ahora resta saber si la rotura de la llanta se debió a los restos recogidos en el circuito o por una tuerca que se haya aflojado de la rueda.
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